Es común entre los candidatos que se postulan a determinadas plazas laborales, se preguntan casi siempre, cuál fue el motivo por el que no se les consideró en el proceso de selección. Una buena parte de reclutadores revisan diariamente cientos de curriculums y al tener un tiempo tan limitado en sus búsquedas, observan las partes de la hoja de vida que les generan mayor atención.
Según estudios, los reclutadores invierten, aproximadamente, seis segundos para revisar cada hoja de vida y, en ese primer vistazo, es donde empiezan a filtrar los primeros postulantes.
Uno de los aspectos que dedican una mayor atención en observar es la siguiente información:
- Nombre del postulante
- Nivel académico
- Experiencia laboral
- Último cargo y empresa que ocupó
- Fecha de inicio y fin de cada posición laboral
- Logros que tuvo en cada una de las posiciones que ocupo
- Conocimientos técnicos (idioma, programas y sistemas u otros estudios especializados).
- Ortografía y redacción.
De igual manera, toman en cuenta palabras claves que calcen con el perfil que ellos están buscando. Si no logras venderte muy bien a través de tu hoja de vida, las posibilidades que seas descartado en un proceso de selección serán altas. Aquí radica la importancia que dediques tiempo en arreglar y mejorar tu currículo, para que logres diferenciarte de los otros candidatos.
Acá te dejamos algunas recomendaciones podrían ser de utilidad:
- Puedes comenzar en mejorar tus datos personales, resumen o extracto y tus tres primeros cargos, y adecuarlo a cada puesto laboral que postulas. Es decir, que no sea general.
- No utilices una dirección de correo electrónico que denote informalidad, debido a que muy probablemente arruinaría tu imagen como profesional y es muy posible que los reclutadores no lo vean bien.
- No incluyas «elementos visuales» que podrían distraer al seleccionador ya que sirve de obstáculo para la información relevante como las habilidades, logros y la experiencia laboral.
- No te olvides de colocar las fechas en los años que laboraste para cada cargo, que sean fáciles de ubicar y asociar por parte del reclutador.
- Redacta de manera lógica y aterrizada tus logros. Estos, deben estar acompañados posteriormente a cada responsabilidad, tarea o función descrita.
- Trata que la mayoría de tus logros sean cuantitativos, así como también que sean propios de tu gestión y no de la empresa.
- Una hoja de vida no debe tener más de dos hojas. Lo ideal es que tenga entre una a dos hojas.
- Mantén una buena estética, ortografía y cuidado al escribir, no descuides tu imagen profesional
- Poner una foto adecuada no con ropa exótica o de cuerpo entero.
¿Cómo hacer una hoja de vida o curriculum ganador?
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